sábado, 20 de agosto de 2011

Siempre quise ir a un JMJ

Desde que está en España el señor Ratzinger hay algo en el ambiente. No sé, quizás es espiritualidad, fé o, a lo mejor, sólo cabreo.
Mi hermana mató el otro día a una paloma en un accidente de tráfico. Chocaron ella y el grácil cuerpo del ave. Ni que decir tiene que la paloma acabó espachurrada en el pavimento y a mi hermana le dio un disgusto. Pobre. Todo esto fue en el momento en que se inauguraba la JMJ en los madriles. Yo lo ví como un indicio. Algo malo estaba a punto de ocurrir. Llegaron las manifestaciones de la fé, los discursos del Papa (la ciencia y sus peligros, la deriva de los principios católicos en europa, etc.) y los porrazos a los laicos que protestaban. Hubo más hostias que en una misa multitudinaria. Y es que estos laicos son de los de poner la otra mejilla. Palomas golpeadas por un peugot con casco policial.

Mientras los jóvenes se divertían con las cuarenta grados en Madrid (este dios no tiene misericordia, no piensa en la elevada edad de las monjitas y los curas) y con sus cosas (ver foto, estas cristianas están pillando vino quinado para la misa, no piensen mal), o rezando en la puerta del sol, en una imagen de mártires rodeados de ateos furiosos (esa es la imagen que yo ví en los telediarios y los periódicos de derechas, lo intolerantes que son esos ateos).

Cosas como esta no deben de permitirse en un estado de derecho. La violencia policial debería ser investigada (algo no muy difícil por que en los videos se ven las caras de los animales con placa y porra). Los laicos tienen todo el derecho del mundo a protestar por el gasto público que ocasiona la visita de este Papa y sus feligreses, que se pagan con los impuestos de todos. Tienen derecho a protestar, tal y como lo hace él denunciando las bodas homosexuales, los abortos y el uso del condón, poniendo en duda la legislación democrática de este país (que por lo menos ha avanzado algo en derechos sociales). Con este dispendio estamos apoyando la difusión de sus ideas, el proselitismo que predican sin callarse (Rouco dijo al principio de las jornadas, que había que evangelizar), el ataque malintencionado a la ciencia por parte de una organización caduca y machista que se atreve a hablar de totalitarismo (así como lo oyen, lo escuché en el hilillo de voz del octogenario de blanco) sin haber criticado ni una sola vez regímenes como el de Franco o Pinochet.

Todo el mundo me dice que tengo que respetar sus ideas, aunque ellos no respeten las mías. Siempre tenemos que poner la otra mejilla y ni siquiera creemos en dios.

Pd.1- El resto de las religiones tampoco me gustan y me parecen ihgual de caducas, machistas y desubicadas como la católica, pero está es la que me toca más de cerca.
Pd.2- ¿Por qué el papa siempre se reune con la familia real, los jerarcas del PP y con el presidente del gobierno? Misterio.




No hay comentarios: